Segovia extendía sus dominios al Norte y Oeste de la actual provincia madrileña, mientras que Toledo ocupaba el este, con Alcalá de Henares y Chinchón como núcleos destacados. Tal y como adelantó este periódico, ingresó 4,7 millones desde 2003. El Barça era su principal cliente, tanto como que sus cuentas se hundieron a partir de 2018, justo cuando el Barça dejó de pagar una vez que Enríquez Negreira dejó el cargo en el CTA.